El Bibby Stockholm, el primer buque-cárcel para alojar a refugiados, ya se encuentra en la costa de Portland, Reino Unido, y está previsto que, en pocas semanas, empiece a alojar a los primeros ocupantes. Esta iniciativa, con la que el Gobierno británico dice que ahorrará «dinero en hoteles donde tiene que derivar a los solicitantes de asilo», fue muy criticada por las organizaciones de derechos humanos.
La llegada de la barcaza al puerto se dio horas después de que la Cámara de los Lores aprobara la medianoche del lunes la polémica nueva ley de fronteras de Reino Unido, con la que el primer ministro Rishi Sunak -hijo de padres africanos de ascendencia hindú.– intenta mostrarse cada vez más a la derecha y pretende detener la entrada otras nacionalidades al país europeo.
De acuerdo a la información oficial, el Bibby Stockholm, que estará en funcionamiento durante al menos 18 meses, tiene capacidad para hasta 500 personas y dispone de 250 celdas dobles. Está destinado para el alojamiento de «varones adultos solteros» que esperan la resolución de su situación administrativa en las islas.
En vez de hacerlo desde la libertad de un hotel, los solicitantes de asilo estarán bajo medidas de «seguridad a bordo las 24 horas, los siete días de la semana, para minimizar la interrupción de las comunidades locales», especificó el Gobierno en su proyecto antimigrantes. El barco estará frente a las aguas de Dorset.
La iniciativa, de la que han hecho bandera tanto Sunak como la ultraderechista ministra del Interior, Suella Braverman, fue muy criticada por las organizaciones de derechos humanos.
Un repaso por la historia (de la esclavitud)
En las últimas horas, se dio a conocer un dato más que curioso: la familia propietaria de la cárcel flotante comerciaba esclavos en el 1800. La empresa Bibby Line Group Limited, contratada por el Gobierno británico, fue fundada por John Bibby en 1807, justo el año que se abolió la esclavitud en el Reino Unido.
Bibby, antes de esto, había sido dueño de tres barcos «negreros» según la base de datos SlaveVoyages. El Harmonie, que en 1805 transportó 250 esclavos angoleños a las Guayanas Británicas; el Sally que en 1806 llevó 250 esclavos nigerianos a Barbados; y el Eagle que en 1806 entregó en Kingston, Jamaica, 237 esclavos cameruneses.
Además, el Bibby Stockholm tiene un historial bastante terrorífico, según Corporate Watch: entre 1994 y 1998 «se usó para albergar a personas sin hogar , algunas de las cuales eran solicitantes de asilo, en Hamburgo, Alemania».
En tanto, «en 2005, se utilizó para detener a solicitantes de asilo en los Países Bajos, lo que resultó ser motivo de controversia en ese momento. Los informes encubiertos revelaron una serie de casos de abuso a bordo, como palizas y explotación sexual , así como intentos de suicidio, registros desnudos de rutina, la muerte de un hombre argelino que no recibió atención médica oportuna por una afección cardíaca», según Corporate Watch.
Estrategia política
La instalación de este barco y la deportación a Ruanda de los migrantes que entren en Reino Unido a través del Canal de la Mancha son las apuestas claves del gobierno Sunak para detener la entrada de los migrantes, uno de los cinco compromisos de gobierno adquiridos por el primer ministro ante los ciudadanos a principios de este año.
Con ello, el mandatario espera, por un lado, un descenso de los solicitantes de asilo en Reino Unido y, por otro, un reavivamiento electoral, ya que las encuestas le van totalmente en contra de cara a las elecciones generales del año próximo.
Las cifras desmienten el discurso
Aunque el Gobierno británico repite de forma reiterada que el país vive una auténtica invasión de refugiados, las cifras oficiales distan mucho de reafirmar esa idea. En 2020 llegaron a Reino Unido 8.713 refugiados por el Canal de la Mancha; en 2021, 28.526; en 2022, 45.723, y, de momento, en 2023 llegaron 13.200. Mientras que, cinco países de la Unión Europea –Italia, España, Grecia, Chipre y Malta– recibieron 100.995 hasta el 16 de julio.
Además de la barcaza Bibby Stockholm, el ministerio del Interior confirmó que alojará a los solicitantes de asilo en otros lugares, en un intento de reducir los costes de hoteles. En marzo de 2023, las autoridades informaron que se utilizarían tres bases militares en desuso en Essex, Lincolnshire y East Sussex: la primera con capacidad para 1.700 personas, la segunda con capacidad para 2.000 y la tercera para un máximo de 1.200. Se abrirá también una cuarta, en el norte de Inglaterra, pero todavía no se ha indicado el número de refugiados que podría acoger.