Un detective privado que investigó durante años el caso de Madeleine McCann, la niña de 3 años que desapareció en 2007 durante unas vacaciones en Portugal, realizó una investigación biométrica y aseguró que no se encontraron rasgos parecidos entre la menor desaparecida y Julia Wendell, la joven de 21 años oriunda de Polonia que inició una campaña en redes porque sospecha ser Maddi.
- Caso Madeleine Mccann: la joven que asegura ser la niña desaparecida compartió sus pruebas fotográficas
- Madeleine McCann: un documental promete “pruebas impactantes” contra el principal sospechoso
¿Julia Wendell es Madeleine McCann?
El exdirector de la agencia de detectives Método 3, Francisco Marco, abordó el tema en el programa radial barcelonés Versió RAC1 de Toni Clapés y explicó que las imágenes que publicó la joven polaca en sus redes para demostrar que podía ser McCann “no concuerdan” con los rasgos de la niña desaparecida, según su estudio.
Si bien Marco se mostró escéptico sobre este asunto, también afirmó que no dispone de pruebas fehacientes para negar la versión de la joven polaca: «Puedo pensar que es un fraude, pero no puedo decirlo sin pruebas«. También subrayó el hecho de que Wendell “contactó a la policía y nadie le hizo caso”, según dice en sus redes.
Por otro lado, en diálogo con el medio español El Independiente, el detective opinó que Wendell solo «busca notoriedad«. Y añadió: «Sin conocer en profundidad los detalles, no me cuadra. No creo que sea ella«.
Los estudios biométricos se utilizan en las investigaciones para el reconocimiento inequívoco de personas a partir de los rasgos conductuales o físicos intrínsecos. Por ejemplo, se suelen comparar las huellas dactilares, las retinas, el iris y los patrones faciales, entre otros elementos.
Quién es Julia Wendell y cuál es su relación con Madeleine McCann
Julia Wendell, una joven de 21 años oriunda de Polonia, tiene la sospecha de ser Madeleine McCann, una niña del Reino Unido que desapareció en extrañas circunstancias el 3 de mayo de 2007 durante unas vacaciones en Portugal que compartía junto a sus padres, Kate y Gerry, y sus hermanos, Sean y Amelie.
A través de varias publicaciones en la cuenta de Instagram @iammadeleinemcann expresó sus inquietudes y se volvió en una tendencia a nivel mundial. «Creo que puedo ser Madeleine. Necesito una prueba de ADN. Los investigadores de la policía del Reino Unido y Polonia intentan ignorarme. Contaré mi historia en publicaciones aquí. Ayúdame», expresa la joven en su biografía.
En esa red social, Julia compara fotos del momento de la desaparición de Maddi con las de su infancia, y sostiene que el parecido es contundente.
En este contexto, Wendell pidió someterse a una prueba de ADN que confirme o rechace su hipótesis, y según contó en esa cuenta, los padres de la niña desaparecida habrían aceptado. Sin embargo, no hay otras fuentes que hubiesen confirmado que la investigación haya avanzado unos pasos en ese sentido.
Caso Madeleine McCann: ¿cómo desapareció?
Madeleine McCann tenía tres años cuando desapareció el 3 de mayo de 2007 durante unas vacaciones en Portugal que compartía junto a sus padres, Kate y Gerry, y sus hermanos, Sean y Amelie.
La familia se encontraba hospedada en un departamento de Playa de la Luz del Algarve. Una noche, los padres de la niña se fueron a cenar con dos amigos y dejaron a Madeleine durmiendo junto a sus hermanos. Al volver del lugar se dieron cuenta que la niña ya no estaba.
A finales del mes de mayo, con la esperanza de encontrar a su hija, los padres decidieron pedir ayudar a las autoridades portuguesas y convocaron a medios tanto nacionales como internacionales. Crearon una web para canalizar las donaciones y aportes que pudiesen hacerse en nombre de la causa.
Aunque hubo otros sospechosos de la desaparición durante estos años, actualmente el principal investigado es Christian Brueckner, un alemán imputado por cinco delitos sexuales ocurridos entre diciembre de 2000 y junio de 2017 contra niñas y mujeres de entre 10 y 80 años.