Durante una reciente audiencia en el Congreso argentino Eduardo Bolsonaro denunció la «censura» y la “persecución política” de la que serían víctimas los opositores a Lula y defendió que se les
Naciones Unidas publica cada año un informe en el que enumera las violaciones de los derechos de los niños en distintas zonas de conflicto a nivel mundial.