El presidente chileno, Gabriel Boric, propuso redactar junto a todas las fuerzas políticas del país una declaración para condenar el golpe de Estado de Augusto Pinochet contra Salvador Allende, del que se cumplen 50 años el próximo 11 de septiembre.
«Hay una herida abierta sobre la cual es necesario conversar. Hay algunos que llamaron a cerrar el duelo. ¿Cómo uno le puede pedir a una víctima de tal violencia que cierre el duelo si en tu país no hubo justicia?», argumentó en declaraciones a la cadena de noticias española Ser. Para ello, es necesario «que convengamos todas las fuerzas políticas, independientemente de nuestras posiciones actuales, que los problemas de la democracia se tienen que resolver con más democracia y no con menos», agregó el mandatario.
«Nada justifica la violación de los derechos humanos de quien piensa distinto», afirmó Boric, quien además indicó: «Si logramos esos consensos en la sociedad chilena, me sentiría satisfecho, invitaré a todos los partidos de Chile a firmar una declaración en ese marco».
Acto en Madrid
Boric hizo estas declaraciones antes de participar en la Casa de América, en Madrid, de un acto por los 50 años del golpe de Estado, en el que se instauró una dictadura militar que duró hasta 1990. Se trató de un régimen que estuvo caracterizado por la violación de derechos humanos y el desmantelamiento del sistema democrático. Miles de personas fueron perseguidas, detenidas, torturadas y asesinadas por razones políticas durante este período.
El evento realizado en la capital española contó con la presencia del expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, el cantante Joan Manuel Serrat, la novelista nicaragüense Gioconda Belli y destacadas figuras de Chile y España. A su turno, Rodríguez Zapatero recordó a Allende con «gratitud infinita» y criticó que quienes «quieren abolir el progreso» son los mismos que también «quieren llevar la cultura a un armario y encerrarla». «Es en la cultura donde se aprende a amar. Y es amando cómo se crea la cultura. En los valores de la democracia, en los más profundos valores de la democracia, cuya defensa es la mejor manera de combatir la reacción y el autoritarismo, está inserto un ideal que Salvador Allende llevaba en su corazón, en su piel y en su cerebro», aseguró Zapatero.
Entrega de premios
En el acto fueron premiados Serrat y el jurista español Baltasar Garzón «por su compromiso y defensa de los Derechos Humanos». En ese sentido, Boric, que estuvo a cargo de la entrega de las medallas, agradeció a Garzón por su papel en la extradición de Pinochet desde Londres en 1998: «No encontramos todavía toda la justicia, pero lo que hizo usted dio al pueblo de Chile esperanza», señaló el mandatario.
Garzón respondió que «como, juez, jurista, persona y militante de los derechos humanos fue un honor» sumarse a la historia de Chile. «Tomé una decisión que desde mi punto de vista era la única que se podía y se debía tomar en ese momento», remarcó. Serrat, por su parte, agradeció el reconocimiento y recordó su primera visita a Chile y su encuentro con personalidades de la cultura, como el poeta Pablo Neruda, y los artistas Violeta Parra y Víctor Jara, este último asesinado por la dictadura. «La cultura nos da más posibilidades de escoger, nos enseña a conocernos a nosotros y entendernos en el ámbito en el que vivimos, a conocernos mutuamente y nos hace capaces de ser mejores colectivamente», sostuvo el cantante.