Chocó a toda velocidad con su vehículo contra el edificio del consulado chino de San Francisco. Tras entrar a las oficinas con su auto, comenzó a gritar: «¿Dónde está el Partido Comunista Chino?». Murió al enfrentarse a tiros con la policía. China exigió que se lleve adelante una investigación y que se «garantice la seguridad de las instituciones y del personal diplomático».